Resumen:
Todo equipo eléctrico en servicio continuo tiene un deterioro natural en su aislamiento, lo
cual va restando su vida útil; es cierto que aplicar un buen plan de mantenimiento a los
equipos electromecánicos, conserva o alarga los años de vida del mismo, pero la mayoría de
éstos tienen una vida útil de aproximadamente veinte años de servicio constante, por lo que
se hace necesario su reemplazo después de haber cumplido con su vida útil.