Resumen:
La alta demanda de los productos alimenticios, han ocasionado que sistemas de
automatización y control se implementen en las platas para lograr una mayor producción a
un menor tiempo y costo. México cuenta con el mayor consumo de bebidas carbonatadas y
esta representa el 80% del portafolio de productos de las embotelladoras, con un consumo
anual superior a los 250 litros por personas [1].
A la vez que se incrementa la demanda, la industria debe actualizarse para poder confrontar
los nuevos retos y problemas que se generan en la producción de dichos productos y seguir
compitiendo con otras compañías; uno de los retos que confrontan las compañías alimenticias
son los estándares de calidad del producto que son fundamental para mantener la vida y
fomentar la buena salud.
Uno de los estándares de la compañía FEMSA S.A de C.V. es la inocuidad de sus productos.
Segundo datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se estima que cada año
enferman en el mundo unos 600 millones de personas- aproximadamente 1 a cada 10
habitantes- por ingerir alimentos contaminados y que 420 000 mueren por esta misma causa
[2]. La planta FEMSA en gran parta logra que sus productos sean inocuos gracias a controles
de higiene, como el uso de cubre boca y cofias dentro de la planta así como lavarse las manos.