Resumen:
El uso abundante de estructuras metálicas en la industria, trae consigo el empleo de técnicas que permitan la conservación y el buen funcionamiento de estas instalaciones.
Las técnicas que se buscan emplear son denominadas Técnicas No Destructivas (NDT por sus siglas en inglés) las cuales se encargan de evaluar el estado de un sistema o un medio ambiente sin alterar su funcionamiento o intervenir en sus procesos, buscando una rápida detección de daños y evitando la participación de seres humanos en este análisis, es decir, automatizando el proceso.
Dentro de este contexto, la tecnología SHM (Structural Health Monitoring) se encarga del monitoreo y análisis de estructuras, normalmente en tiempo real, para definir su estado de funcionamiento y evaluar su efectividad en función de pruebas NDT que se aplican a las mismas estructuras, para conocer su fiabilidad y aumentar el tiempo de vida de estas grandes estructuras que soportan a la industria y al desarrollo económico.