Resumen:
La producción de energía en un sistema eléctrico de potencia debe responder
a exigencias que se hacen a la seguridad, calidad y economía de su suministro. El
nivel de calidad está dado, entre otros parámetros, por la constancia de las
magnitudes de tensión y de frecuencia.
Además, la constancia de la frecuencia en Sistemas Interconectados,
contribuye a lograr el funcionamiento estable de los mismos y facilita su control. Es
por ello que la regulación de frecuencia es un tópico técnico de extremada
importancia que se presta para la formación de un tipo de mercado auxiliar. En un
sistema interconectado grande, muchas centrales generadoras grandes y pequeñas
están conectadas síncronamente y por esto tienen la misma frecuencia, lo que se ve
afectado por las variaciones de frecuencia, que perjudica al sistema entero.
Lo más probable es que la producción de los generadores en cualquier
instante difiera de la carga del sistema. Si la salida es más elevada de lo que la
demanda exige, las máquinas tenderán a aumentar su velocidad y la frecuencia
aumentará y viceversa, por lo tanto, la frecuencia no es una magnitud constante sino
que varía continuamente; estas variaciones son normalmente pequeñas y no son
percibidas por la mayor parte de los consumidores.