Resumen:
Hoy en día las empresas permanecen en cambio constante en un mercado muy competitivo es por ello que las organizaciones tienen que desarrollar y mantener ventajas competitivas que permitan permanecer y destacar en su sector, teniendo en cuenta un elemento imprescindible para poder funcionar: los clientes.
Sin clientes no pueden vender productos ni prestar servicios y su satisfacción se ha convertido en un elemento necesario para que las empresas y organizaciones sean competitivas.
A las empresas les interesa que sus clientes estén satisfechos, para que continúen comprando y recomienden lo productos o servicio a sus conocidos, amigos y familiares, o a la sociedad en general.