Resumen:
Los probióticos, al ser administrados en cantidades suficientes, pueden beneficiar la salud del huésped (FAO/OMS, 2002); dentro de los efectos saludables destacan la contribución nutricional, atenuación de la intolerancia a la lactosa, mejora de la digestibilidad normal, prevención de cáncer, reducción de infecciones respiratorias, reducción de colesterol sérico, mejora de la salud gástrica y coadyuvante en tratamientos con antibióticos (Ouwehand et al., 2002; Rowland et al., 2010).
Lactobacillus plantarum BAL-03 ITTG y Lactobacillus fermentum BAL-21 ITTG, fueron evaluadas por González (2013) quien reportó un crecimiento celular de ambas cepas en el orden de 109 UFC/mL. Además, es importante mencionar que ambas cepas presentaron una producción de ácido láctico alrededor de 22 g/L y actividad positiva antimicrobiana contra algunos patógenos (E. coli, Salmonella typhimurium y Staphilococus aureus).